La vida es chula

¡Hola a tod@s! Ya os conté en esta entrada lo importante que es para mi autoestima la marca Desigual, y que prácticamente es un must en cualquiera de mis looks. Además, las dependientas de la tienda a la que acudo habitualmente, en el centro de Cádiz, son todas encantadoras. Prueba de ello es que al enterarse de mi afición por las Barbies, una de ella me hizo un regalo muy especial...

Hace unos años, para decorar el escaparate, utilizaron versiones a escala de sus modelos más populares, y he tenido la suerte de que me regalaran no uno... ¡sino dos! Hoy os enseñaré el primero, que está basado en este traje, sólo que en tonos rojos y anaranjados en lugar de verdes. 

El problema es que el vestido tenía el largo perfecto para una Barbie, pero no el ancho. De hecho, estuve dudando de si utilizarlo como camiseta para Nancy... Siento no poder poneros una foto, pero la única que tenía se la hice con mi antiguo móvil "patata china" y cuando murió me quedé sin ella... 

Al final, opté por adaptárselo a Barbie, y de un sólo traje he podido hacer dos. De la parte trasera saqué el vestido tubo que pudistéis ver en la entrada de despedida del verano, y con la parte delantera hice un vestidito de escote corazón bastante apañado... Para enseñároslo, me lie la manta a la cabeza y monté un diorama con un toque vintage que contrasta con el colorido y el diseño del vestido:

Para completar el look, utilicé un bolsito Liv adornado con un lazo, unos zapatos rojos Midge Life Style, y unos pendientes que le apañé en un ratito.

 

La decoración es una mezcla de cosas que ya tenía con alguna nueva incorporación (la silla, las patas de la cómoda, los jarroncillos de adorno) que llegaron hasta mí casi como por arte de magia (de la de las hadas madrinas)... pero esa es una historia que merece una entrada aparte. 

La  cómoda es en realidad una cajita decorada con papel de scrapbooking y cuentas de madera, y unas patas añadidas. El espejo y todos los cuadros están hechos con etiquetas de scrapbooking. 

Ya os dije que a esta chica la ibais a tener hasta en la sopa... No sólo me gusta su peinado, sino que su maquillaje (o la ausencia del mismo) me parece perfecto.

La parte inferior de la  pared está hecha con paletas de madera, pintadas de blanco y pegadas con silicona. Las hice en paneles de siete, y están sujetas con blue-tack, para poder utilizarlas con mayor comodidad. 

Bueno, esto es todo por hoy... espero que hayáis disfrutado de la entrada tanto como yo en prepararla...

¡Besos para tod@s y feliz fin de semana!