Confesiones de una Barbiehólica I. Aquellos maravillosos años.

Está bien. Lo confieso. Paso de los treinta y me encantan las muñecas, especialmente las Barbies. Guardo recuerdos preciosos de las tres primeras que tuve. Desgraciadamente, guardo sólo eso, recuerdos, porque todo lo demás -muñecas, ropa y accesorios- fue forzosamente heredado e inevitablemente desperdigado por mi hermana pequeña. La número uno fue una preciosa "Pink and Pretty", que incluía falda, pantalones, top, chal y una especie de pequeña toca de tul. Os dejo una foto que encontré en internet.


A ésta siguió una no tan venerada "Angel Face". La encontraba bastante pálida y a mis ojos de niña, las mechas castañas estropeaban su melena rubia. Para colmo, vestía un traje de una sola pieza, por lo que no podía combinarlo fácilmente. La parte positiva es que aquel año, aparte de la muñeca, los Reyes Magos me obsequiaron con la "Cama de ensueño" y el "Tocador mágico". Aquí tenéis una foto sacada de internet.

La número tres fue una fantástica "Day to Night", de la que conservo un par de zapatos blancos con la puntera rosada que conseguí esconder y todavía guardo celosamente. Mi nueva Barbie traía compañía: el Ken "Day to Night", además de un sofá que se convertía en cama doble. Supongo que mi madre pensó que como un buen matrimonio, ambos debían compartir el mismo colchón. Las fotos, por supuesto, no son mías.

Afortunadamente, mi siguiente muñeca sobrevivió al holocausto fraterno. Era una Princesa Laura, y por su larga melena castaña y su preciosa cara se convirtió en mi favorita. Durante años, vestida de Piconera (el traje típico de Cádiz, que confeccionó mi abuela a juego con el mío), reinó sobre una estantería de mi cuarto. También conseguí salvar la muñeca de mi hermana mediana, por lo que ahora las dos viven felizmente en un rincón de mi despacho. Os dejo una foto de la ropa (de internet) y otra de mis Lauras.

Una de ellas lleva puesto un vestido de la colección "Barbie por el mundo", el dedicado a Rusia. También tengo el abrigo, las botas, el gorro y el manguito, pero si se lo pongo todo lo que menos se ve es la muñeca. El vestido de la segunda es de la colección que sacaron con la película "Barbie Rapunzel". Tiene puestos los zapatos originales y venía con una capa, que he modificado y convertido en un conjunto de falda y capa corta estilo Channel.