With a little help of my friends II

La semana pasada os mostré cómo completé dos de los sets que había conseguido en el mercadillo, y hoy continuo con otros dos, de nuevo "with a little help of my friends".

Esta vez los dioramas no estaban destinados a ser expuestos en mi estantería, simplemente quería ofrecer un escenario a mis nuevas chicas. De hecho, el segundo de ellos ni siquiera puede ser considerado un diorama, sino más bien un fondo arregladito.

Del set "Teen Skipper Cool Sitter" de 1998, sólo quedaban en el mercadillo algunas piezas sueltas. Faltaban dos bebés, un biberón y un sonajero, unos pañales, los pantalones de pana y lo que era más importante... la preciosa Skipper.

La falta de pantalones la arreglé enseguida gracias a la tienda "Barbie, mi pequeño tesoro", y el resto de complementos no me parecían muy importantes. Pero encontrar una suplente adecuada para Skipper ya era más difícil. Sus medidas son más pequeñas que las de un cuerpo de Barbie ochentera o noventera. La solución llegó a casa en un paquete sorpresa que me envió Eva, del blog Cristal, junto con tres princesas Disney y una Sindy. En cuanto la ví, supe que sería la canguro perfecta, aunque por más que he buscado, no he conseguido identificarla a pesar de ser original de Mattel. La he llamado Nora, y fijáos qué guapa posa con los dos bebés a los que cuida. Acaba de llegar de darles un paseo por el parque, y ha subido a su cuarto para prepararlos para la hora de la comida.

 

 
Cambiar los pañales a dos bebés es harto complicado...  pero Nora se maneja a la perfección. Realmente tiene mano con los niños...

 

Y por supuesto le encanta jugar con ellos

 

Eso sí, ¡al final de la mañana está ya rendida!

El último set es el de "Barbie Sweet Treats", también de 1998. Al igual que en el anterior, me faltaban algunos complementos, como la mesa de cocina y los utensilios, el delantal y de nuevo, la muñeca.

El delantal pude conseguirlo también en la tienda "Barbie, mi pequeño tesoro", y la mesa no he podido encontrarla, pero para la muñeca di con una buena sustituta en mi caja de Barbies para restaurar. Se trataba de la Barbie Mia Colucci, que tras una rápida operación acabó en un cuerpo TNT noventero.

Por supuesto, para esta preciosa repostera no cabía otro nombre más que el de mi querida Eva, a la que desde aquí quería dar las gracias por el regalo que me envió. Este es mi pequeño homenaje a una mujer que además de una entregada madre es una excelente profesora y artista del fondant, y por supuesto una persona encantadora, que siempre tiene un comentario positivo para animarte.

Desgraciadamente, esta Eva a escala 1/6 no posee las dotes culinarias de su tocaya, sobre todo debido a que su dueña tampoco es que sea muy mañosa que digamos. De todas formas, ha querido compartir con vosotr@s una de las pocas recetas que siempre le salen a la perfección, y que le dio mi tía Merche, cántabra de nacimiento y gaditana de adopción: la quesada pasiega.

-75 gramos de margarina o mantequilla.
-150 gramos de harina.
-300 gramos de azúcar.
-Dos huevos.
-1 yogur natural o de limón.
-1/2 litro de leche.
-Canela en rama y molida.
-Una corteza de limón.
-Una pizca de sal. 

El proceso es muy sencillo: en un cazo, se pone a calentar la leche con la corteza de limon y la canela en rama, y precalentamos el horno a 175º. Mientras, en un bol batimos la harina, el azúcar, el yogur y los huevos, y añadimos una pizca de sal (lo que sujetemos con la punta de los dedos).  A esta mezcla se le añade la leche, pasada por el colador, y se remueve. Untamos un molde con la mantequilla, y después le añadimos la mezcla. Se espolvorea con canela al gusto, y se introduce en el horno durante unos 45 minutos.

Como véis, a Eva le ha quedado perfecta...

 Os aconsejo que os animéis a hacerla, ¡sale buenísima!

¡Besos para tod@s y feliz fin de semana!