viernes, 31 de enero de 2014

Super Barbie Fragilistico Espialidoso

Supongo que much@s de vosotr@s ya sabréis que hoy se estrena la película "Al encuentro de Mr. Banks" ("Saving Mr. Banks"), protagonizada por Tom Hanks y Emma Thompson. El argumento se inspira en el titánico esfuerzo de Walt Disney por conseguir los derechos para llevar a la gran pantalla el popular libro infantil "Mary Poppins" de P.L. Travers, así como en la infancia de la autora, que la llevaron a crear a la niñera más sabihonda, mágica y querida de varias generaciones de niñ@s.






Tengo muchas ganas de ver esta película, y no sólo porque los actores se encuentren entre mis favoritos, sino porque desde niña me ha cautivado el universo Disney, y porque aun no descarto que si algún día me toca el Euromillón me haga construir una casa para mis vacaciones justo al lado del Palacio de Cenicienta. Sólo he estado en Eurodisney una vez, en una excursión escolar como profesora acompañante, y debo reconocer que a los diez minutos ya quería quedarme a vivir allí...




Tuve la suerte de ver Mary Poppins en pantalla grande. La repusieron en el Cine Andalucía, en el corazón de Cádiz y hoy ya desaparecido, y mi prima-barra-hermana mayor nos llevó a verla. Nos encantaron las canciones y salimos de la sala con el firme propósito de escribir una carta a nuestros padres pidiendo nuestra propia Mary Poppins.




De entre todas las escenas de la película, una de mis favoritas es la que tiene lugar dentro del dibujo de tiza que Bert ha pintado sobre la acera. Disney era un experto en combinar imagen real con fondos y personajes animados, y aunque P. L. Travers estaba totalmente en contra de incluirla, por fortuna el productor impuso su visión y nos regaló un despliegue de imaginación, color y por supuesto, música. Lo cierto es que teniendo en cuenta que la película se realizó a principios de los sesenta no tiene nada que envidiar a las de ahora. De hecho, creo que estas escenas tienen un encanto que hoy en día sería difícil de reproducir.




Dentro del dibujo, Mary Poppins cambia su serio atuendo de institutriz por un precioso vestido blanco adornado con lazos y encaje, y Bert su ropa de artista callejero por una colorida chaqueta, pantalones blancos y hasta un sombrero de rafia.


El año pasado, cuando me traje a casa al Ken Spock que terminaría convirtiéndose en mi Sheldon OOAK, se vino conmigo otro Ken que así a primera vista no encajaba con mi colección. Sin embargo, por los diez euros que valía, supuse que podría aprovechar su cuerpo articulado y por supuesto su ropa. Se trataba del Ken Bert de la serie Mary Poppins y resultó que, como como siempre, una vez que llegó a casa me encariñé con él y decidí darle un rinconcito en mi estantería. No tengo foto de la caja, así que os pongo una que encontré en internet en una página de venta:


La serie se completaba con las muñecas de Mary Poppins, Jane y el pequeño Michael, pero la verdad, no estaba dispuesta a pagar lo que pedían por ellas en internet (en la tienda ya no quedaban). Sin embargo, reconozco que no descarto hacerme con ellas en el futuro... ¡me parecen monísimas!








De todas formas, preparar una entrada sólo con el pobre Bert me parecía un poco triste, así que hice un casting para elegir a la muñeca con el molde más parecido a Julie Andrews (que resultó ser Carol), y tras ello me dispuse a apañar un vestido que al menos se inspirase en el original. Como base, escogí el de la colección de RBA correspondiente a Brasil, y estas navidades me lo llevé a la Rioja para entretenerme durante las frías tardes en las que estaría totalmente desconectada de internet.




Teniendo cuidado en utilizar puntadas que luego pudiera deshacer, le cogí el bajo para acortarlo, cubrí el lazo rojo con otro blanco, y decoré el vestido con pequeñas lazadas rojas. Con algo de encaje eliminé el escote imitando la pechera del original, y añadí un fajín de raso. El único problema fue que al estar desconectada de internet y olvidar llevarme alguna foto de referencia, tuve que hacerlo todo de memoria y cometí algún que otro fallo, aunque al menos me pareció reconocible. Con un poco de carton forrado con tela y adornado con encaje y flores de raso hice el sombrero, y con cartulina y una sombrillita de cocktail apañé el parasol. Unos botines Basics y Carol estaba preparada para hacer de Mary Poppins en Barbieholics.


Para la sesión de fotos, saqué mis ceras de colores y me lancé sobre una cartulina con más ganas que habilidad, para tratar de reproducir un fondo de "dibujos animados". En cuanto estuvo listo, cogí el mando de mi DVD y me dispuse a congelar las imágenes de la película original para poder copiar las poses de los protagonistas con tanta fidelidad como me fuera posible. Reconozco que mientras las hacía, no pude resistirme a cantar con Bert...


¡Qué buen día hace hoy!




Igual que en mayo está el sol...




¡Dan ganas de volar!




Nunca verde así el prado ví, con un cielo igual...




¡Oh qué alegre ilusión es ir con Mary,
Mary me hace a mí soñar!




Cuando llueve y hay que resguardarse
Mary hace al sol llamar.


Contar más de mil maravillas sabe
y sabe hacer hablar hasta a una flor.





Si a Mary ves llegar feliz serás
tu corazón te hace ¡plim, plom, plam! 



¡Qué alegre ilusión es ir con Mary
qué bueno es ir con Mary a pasear!




La verdad es que la sesión de fotos fue eterna... Mi padre nos hizo a Acerico y a mi un artilugio para poner a posar a las muñecas con mayor libertad, y ésta me pareció la ocasión perfecta para estrenarlo. Creo que el resultado es bastante bueno, pero no os podéis figurar la de tiempo y sudor que me costó obtener estas imágenes...




Tanto es así, que aunque había preparado a las tortugas que ayudan a Mary y Bert a cruzar el lago y a los caballitos del carrusel para hacer algunas fotos (el de Bert lo guardaba de la caja y el de Mary lo dibujé utilizando al otro como referencia) al final estaba tan cansada que me limité a sacarles una foto posando con ellos en lugar de montándolos.




También quise incluir unos primeros planos de Carol como Mary y Bert, que por cierto es clavado al actor original, Dick van Dyke.








Eso sí, después de haberme hartado de dibujar y recortar mariposas, decidí tomar una última foto que homenajeara no sólo a esta película, sino al maravilloso mundo creado por Disney.




Los pequeños muñecos de goma dura los guardo desde que era pequeña. Nunca los he contado, pero debo tener unos sesenta entre los de mis hermanas y los míos. A ver si un día me animo a fotografiarlos todos para compartirlos con vosotr@s.




En fin, espero que hayáis disfrutado con esta nueva incursión a la infancia (¡qué nostálgica ando últimamente), y como siempre, os deseo...


¡Besos para tod@s y feliz fin de semana!


martes, 28 de enero de 2014

My Ultimate Closet: I ♡ Sales! & Poll Results

By Cuca.

¡Hola Barbiehólic@s!

Al fin os puedo mostrar el resultado de la encuenta 'Choose Your Style - 2013'. Lo cierto es que las votaciones han estado bastante reñidas, tanto que en tercer lugar nos encontramos con dos outfits empatados a 15 votos: Sweet Hrt City y Pink Coat.



En segundo lugar tenemos otro empate, con 17 votos nos encontramos los conjuntos Stripes y Angora Jacket.



Y como outfit ganador de esta edición, un look muy especial para mí, no tanto por las prendas que lo componían, sino por el evento en el que lo pude lucir y que me dio la oportunidad de conocer en persona a muchísima gente especial así que... redoble de tambores... con 20 votos, el conjunto  Convención Nacional de Coleccionistas en España 2103.



¡Muchísimas gracias a tod@s por votar!

Y ahora, al igual que el pasado año, paso a mostraros el estilismo que escogí para ir de rebajas. La verdad es que este año me ha decepcionado bastante, definitivamente creo que las tiendas nos toman por tontas, y desde luego que tontas somos un rato por seguir acudiendo a comprar en época de... ¿rebajas? Cinco euros menos no es una rebaja, es un descuento. Pero lo que sin duda me ha molestado más es ver una prenda a la que le había echado el ojo en el mes de noviembre etiquetada como... ¡¿Nueva Colección?! WTF? Podéis imaginar el cabreo que pillé y lo indignada que salí de allí de una conocida tienda que comienza por ZA y termina por RA.

En fin, enfados aparte, para esas maratonianas mañanas en tiendas que sí aplican rebajas y no ridículos descuentos (toma nota Amancio) lo mejor es ir lo más cómoda posible así que pensé que era la ocasión perfecta para estrenar mis nueva cazadora y mis nuevos botines. ¡Me encantan!


La cazadora, en color chocolate (uhm, chocolate...) la tenía desde hacía varios meses sin que me hubiese decidido a mostrarla, hasta que vi los botines ebay. ¿No son la pareja perfecta?



Los combiné con unos jeans y camiseta básica blanca. Como bolso escogí el On Location Barcelona, y es que la combinación rosa-marrón siempre me ha gustado, me recuerda a los helados de fresa y chocolate.




Después de una dura jornada de rebajas acabé comprando sólamente una prenda, la cual estoy segura que le va a gustar muchísimo a nuestra amiga karmen perez, del blog mimundoconbarbie. ¡Pronto os la mostraré!

¿Y vosotr@s? ¿Habéis tenido suerte en las rebajas?

¡Os espero en mi próxima entrada! ¡Muackis!


Chaqueta: Barbie The Twilight Saga: Breaking Down-Part 2
Camiseta: Handmade by Acerico
Jeans: Barbie Styled by Tim Gunn #01
Bolso: Models On Location - Barcelona
Botas: ebay

viernes, 24 de enero de 2014

Recuperando la infancia: Sleeping time

La entrada de hoy es muy especial para mí, por muchas y variadas razones que seguro averiguaréis enseguida. En realidad todo comenzó hace más de un año, con un paquete cuyo contenido, a pesar de su importancia, había languidecido en mi vitrina hasta hace un par de semanas por aquello de las prioridades y que, cuando tomó vida, se convirtió en la inspiración que hacía mucho que necesitaba. Pero dejémonos de abstracciones, y vayamos con la historia de hoy...

Mientras Scarlett, mi marido y yo pasábamos las Navidades en La Rioja, Barbie decidió tomarse unos días para ir a visitar a sus padres al hotel que éstos todavía regentan en las verdes tierras del norte de Inglaterra. Parece ser que la pobre andaba con morriña y echaba muchísimo de menos a su familia. Desde allí, nos envió una fotografía que tomó su padre en uno de sus paseos por los páramos ingleses.




A su vuelta, nos contó que una de las cosas que le dieron algo de pena de su estancia con su familia fue comprobar que, debido a unas obras de restauración necesarias, sus padres se habían visto en la obligación de deshacerse de su dormitorio "de soltera". A pesar de que le habían buscado una habitación mucho más moderna y funcional, saber que nunca volvería a disfrutar del que había sido su refugio durante su infancia y juventud le produjo un gran pesar. 

"Podrán pasar muchos años" comenzó a decir, "pero nunca olvidaré aquellos momentos vividos entre esas cuatro paredes. Recuerdo que cada noche apuraba todo lo que podía para jugar con mis muñecas




Me encantaba peinarlas y vestirlas... Mientras lo hacía, el tiempo pasaba volando. 
 



Tanto, que cuando mi madre aparecía para comprobar si ya estaba acostada, solía sorprenderme con el cepillo en una mano y mi muñeca en la otra.
 



Será porque es mi madre, pero con su pelo suelto y su sonrisa, me parecía la mujer más guapa del mundo.
 



Eso sí, era inflexible: había que recoger todos los juguetes y colocarlos en su sitio.




A mí madre le encantaba el pelo largo, tanto para sí misma como para mí. De hecho, creo que si aún lo llevo así es porque ella me enseñó a adorar una bonita melena. Eso sí... la pobre a veces se pasaba horas desenredando los nudos que me había hecho durante el día.
 



Antes de irme a la cama, siempre me hacía las mismas pregunta: '¿Te has lavado ya los dientes?', y '¿Has preparado el uniforme para el cole?'.
 



A veces la respuesta a la primera pregunta era negativa, y me enviaba al baño corriendo, no se me fueran a 'picar los dientes'. La respuesta a la segunda pregunta era siempre afirmativa. Me encantaba preparar mi uniforme para el día siguiente. De hecho, es otra costumbre inculcada por mi madre que todavía sigue presente en mi vida. Y es que no pasa una noche sin que deje, sobre la silla de mi dormitorio, la ropa del día siguiente.
 



Mi madre sabía que era muy responsable y que nunca dejaba mis tareas sin hacer. Sin embargo, también le gustaba que preparara la mochila para la mañana siguiente.







Después, mi madre me acompañaba a la cama, vestida de rosa, poblada de estampados, encajes y bordados y guardada por una pequeña mesilla de noche vestida a juego con la cama y coronada por una lámpara-muñeca. Todo ese despliegue de barroquismo femenino había sido cuidadosamente diseñado y confeccionado por mi abuela, la madre de mi padre, que en sus ratos libres (que eran muchos), gustaba de coser y poblar todas las habitaciones de pesadas cortinas, tapetes y un sinfin de detalles recargados.

 





Yo era una ratita de biblioteca, una devoradora de libros. Por eso, mi madre me permitía, cada noche, dejar la luz encendida durante media hora para disfrutar de mis aventuras favoritas en compañía de Los Cinco, Los Hollister, Puck o los personajes del universo Disney. 

 


Por supuesto, antes de irse, mi madre me obsequiaba con un beso de buenas noches, y siempre, la misma despedida: 'Hasta mañana si Dios... quiere'.

 


Al final, y tras un rato de lectura, el cansancio me podía y muy a mi pesar, tenía que dejar mi libro hasta el día siguiente.







Ahora que no vivo con mis padres y sólo voy a su casa de visita, echo de menos aquella sensación de seguridad que me arropaba cada noche..."


Supongo que de momento habréis averiguado al menos una de las razones por las que elaborar esta entrada ha sido tan especial para mí. Este pequeño homenaje a mi madre y a mi infancia me ha salido del corazón y me apetecía mucho compartirlo con vosotros. Además, si añadís unas cortinas, cambiais el diseño de corazones de la colcha por uno de flores, elimináis el dosel y multiplicáis las camas por tres, éste podría muy bien ser una copia bastante fiel del dormitorio de mi infancia, vestido al completo por mi abuela y su incansable máquina de coser.

Además, ésta ha sido la oportunidad perfecta para ir completando mi colección de Barbies de mi infancia. En esta entrada, os mostré cómo había conseguido tanto el Tocador de Ensueño como mis Barbies Angel Face y Pink'n'Pretty. El verano pasado, encontré en Santo Domingo un set perfecto para darle vida al Tocador, ya que es prácticamente imposible encontrar los accesorios originales, y creo que el resultado ha sido muy bueno.




Sin embargo, la verdadera inspiración de esta entrada vino con la Cama de Ensueño, que encontré por 8€ (gastos de envío incluidos y un chollo teniendo en cuenta los 40 que suelen pedir por ella en Ebay), aunque eso sí, en un estado bastante precario.




Suciedad aparte, las piezas que sujetaban el dosel habían sido arrancadas de cuajo, y lo que es peor, faltaba una de ellas. Sin embargo, después de pensar un poco, se me ocurrió que podría fabricar una sustituta con el mango de un pincel.




Lo lijé para darle algo de forma, y le añadí una chincheta en forma de bolita en la parte superior para que no desentonara demasiado. No conseguí imitar la forma inferior, pero tras una mano de pintura, no tenía tan mala pinta. Usé algo de masilla arreglatodo para fijar todas las piezas, y al añadir el dosel, el colchón y la colcha el resultado fue más que satisfactorio.





Dado que los cojines originales no venían incluidos, me animé a fabricar uno, además de una almohada y una sobrealmohada como la que yo tenía cuando era pequeña. Eso sí... (redoble de tambores) ¡al fin me atreví a estrenar mi máquina de coser! Conseguí enhebrar la aguja al segundo intento y no podía creerme que realmente estuviera cosiendo. Es cierto que el resultado dista mucho de parecer profesional, pero no os podéis figurar la ilusión que me ha hecho crear algo así.







En fin, éste es el aspecto que presenta esa sección de mi estantería, dedicada a mi infancia y que espero poder seguir llenando con más de esas muñecas con las que compartí tantos y tan buenos momentos.




En fin, espero que hayáis disfrutado de esta entrada, y sobre todo, os deseo...


¡Besos para tod@s y feliz fin de semana!